Presa en el río Pontillón

Lugar
Boqueixón, A Coruña

Latitud: 42º 47′ 42,96″ N
Longitud: 8º 24′ 14,54″ W

Año
2014

Promotor
Comunidad de regantes del núcleo de Caldelas, Vedra. Propietarios legales del agua que desvía la presa. La zona de riego afecta a una superficie 24 hectáreas. Esta superficie se divide en 73 fincas pertenecientes a 53 propietarios.

Colaboradores
Luis Miguel Fernández López

Constructor
Ramsa (suministro de bloques de granito)

Fotografía
Roi Alonso. www.roialonso.com
Estudio Fermin Blanco

Presupuesto
908,75 e




Memoria & Fotografías

El proyecto mezcla elementos que lo hacen especial, una situación envidiable al pié de la cascada de Codeso en el río Pontillón y una historia social que hunde sus raíces en el siglo XIX (contrato de 1855). Ya desde antiguo existe una comunidad de regantes de la aldea de Caldelas que tiene unos derechos adquiridos a través de un contrato respecto a un porcentaje de agua que obtienen a los pies de la cascada y transportan a través de un canal que mantienen de modo cooperativo entre todos desde entonces. El contrato especifica claramente los minutos y caudales a que cada regante tiene derecho. Entre medias también abastece un molino de uso comunitario hoy día en estado ruinoso.

Pese a la exactitud de los datos y caudales, la toma se efectúa de modo artesanal con ayuda de una presa con mampuestos que cada invierno debe someterse a las reparaciones propias debidas a los desperfectos de las riadas invernales. Este continuo hacer y deshacer no ha estado exento de las polémicas propias de estos casos y las disputas habituales sobre la posición y altura de la presa de modo que el caudal obtenido podía variar en virtud de su posición. Por este motivo se decide hacer una presa de carácter «definitivo» que no requiera tales labores de mantenimiento y que ponga fin a tales disputas.

El proyecto parte pues de un respeto por las condiciones ambientales y por supuesto por un respeto absoluto ante la tradición. No olvidemos que no es un proyecto que se desarrolle con carácter ambiental o etnográfico, responde a una necesidad real, y parte de la comunidad de regantes aún hoy mantiene su uso y reclama sus derechos históricos.

Como primer paso se define la posición de la presa siguiendo las indicaciones de los más viejos y por tanto conocedores del tema. También nos apoyamos en la zona rocosa del margen izquierdo evitando la excesiva erosión de esa zona donde el terreno es principalmente arcilloso. La cascada desciende sobre una lengua de roca negra de extrema dureza lo que ha mantenido hasta hoy ese corte con su fisionomía casi inalterable.
La normativa medioambiental que en la actualidad recae sobre estas actuaciones es casi una anécdota frente al peso de tradiciones consuetudinarias aunque evidentemente todo debe seguir su curso y así comienza la obra (tras los pertinentes permisos) variando el curso del río por el canal de riego.

La solución definitiva consiste en un grupo de 6 grandes bloques de granito (675 Kg / ud) que se instalan verticalmente y cuyo volumen se debe a un interés en aumentar su peso propio para evitar cimentaciones y movimientos cuando lleguen los inviernos.
Los bloques dejan huecos entre medias que serán cubiertos con maderos insertados en las guían labradas en la propia piedra.
En definitiva una solución que zanja los litigios sobre la posición y caudal de agua a retener y que pasa a formar parte de la composición cascada-río-presa-canal tratando de mantener la fuerza del lugar complementada con un magnífico espacio de romería que cada año se llena de alegría pese a lo aislado del lugar.





Deja un comentario